Llegan las esperadas vacaciones de invierno y con ellas el desafío para muchas familias de organizar actividades para los más pequeños de la casa. No siempre se puede salir de paseo o viajar, entonces, ¿por qué no aprovechar la cocina como un lugar lúdico para compartir y disfrutar?
Según Felisa Vásquez, nutricionista del área Asuntos Científicos para Centro y Sudamérica de Herbalife, permitir que los niños participen en la cocina los hace más propensos a probar nuevos alimentos y desarrollar una mejor relación con la comida.
“Cocinar juntos permite enseñar sobre los ingredientes, el valor nutricional de los alimentos y la importancia de una alimentación equilibrada. También es una buena ocasión para involucrarlos en la planificación de las comidas y promover su autonomía en la cocina”, asegura la especialista.
En este contexto, la nutricionista recomienda que a la hora de cocinar prefiramos ingredientes nutritivos como:
- Harinas integrales o de avena.
- Frutas y verduras frescas.
- Proteínas de calidad como huevos y yogur.
- Frutos secos y semillas (según la edad del niño).
- Endulzantes naturales como plátanos maduros o dátiles, en lugar de azúcar refinada.
Y aconseja realizar preparaciones simples, coloridas y que permitan la participación activa de los niños, por ejemplo:
• Muffins saludables: con avena, plátano y chispas de chocolate sin azúcar o con alto porcentaje de cacao.
• Galletas de avena y manzana: fáciles de hacer y llenas de sabor.
• Mini pizzas caseras: con masa integral y toppings variados.
• Pancakes de avena y zanahoria: ricos en fibra y sin exceso de azúcar.
• Trufas energéticas: con dátiles, cacao y frutos secos.
Finalmente, respecto de los cuidados y nutrición para los niños, Felisa Vásquez afirma que “la clave está en el equilibrio: no prohibir, sino enseñar a elegir. Fomentar una alimentación variada, rica en fibra y proteínas”.